Ya no me acuerdo mucho cómo era la vida antes de No Te Va Gustar, confiesa con una sonrisa Emiliano Brancciari de la banda que lidera desde hace treinta años. El esfuerzo es en vano, pero comprensible.
Como cantante de NTVG, el artista argentino-uruguayo vivió con intensidad cada eslabón del derrotero rockero y logró tachar de su lista de pendientes algunos de los sueños más grandes de cualquier músico rioplatense: desde colaborar con Charly García, Mandrake Wolf y el Bocha Sokol, hasta grabar con el emblemático Joe Blaney en producción, llenar estadios y recorrer el mundo con su música. No muchos pueden alardear de ese prontuario, pero Emiliano y sus compañeros sí.
Mientras celebra tres décadas de ruta junto a su banda principal, Brancciari está encarando una nueva etapa en su carrera con su proyecto solista, al cual decidió bautizar simplemente EMI. Es un gusto que me estoy dando, que va al costadito, y lo disfruto un montón, dice sobre esta nueva faceta creativa, donde explora sonidos y emociones más personales, alejados del formato de banda, y con la que se presentará por primera vez en Niceto Club este jueves 8 de noviembre.
Esto me pone mucho más nervioso que tocar en un estadio -admite-. Sin embargo, lo busco y lo disfruto. Disfruto de tocar para una masa de gente pero también para pocas personas y sentir sus miradas o los silencios entre tema y tema.
Según cuenta Emiliano, el nacimiento de su proyecto solista fue orgánico y ocurrió en una época un tanto extraña, condicionada por la pandemia y el aislamiento, cuando No Te Va Gustar acababa grabar el disco Luz (2021). Por aquel entonces, con el álbum ya publicado y sin poder presentarlo debido a las restricciones que aún existían para los eventos masivos, el músico aprovechó el impulso creativo para seguir componiendo nuevas canciones con su propio estilo, pero esta vez sin tener en cuenta a sus compañeros.
Los 60 Principales. ©1998-2024.