Los fiscales acusan a Sean Diddy Combs de intentar influir corruptamente en su juicio, luego de que, presuntamente, tratara de chantajear a las supuestas víctimas del caso.
De acuerdo con fuentes cercanas, el productor y rapero ha estado usando las cuentas telefónicas de otros presos para evitar que las autoridades escuchen sus llamadas, algo que evade los lineamientos penitenciarios.
Aunado a ello, Diddy le pidió a familiares e integrantes de su equipo legal para añadir a más personas en las llamadas, situación que tampoco está permitida por la Oficina Federal de Prisiones.
Además, Combs estaría planeando publicar información que lo asista en su defensa, al enfrentar cargos relacionados con abuso sexual, violación, tráfico de personas, entre otros.
Se prevé que el juicio de Diddy comience en mayo del próximo año y que se extienda durante un mes. Mientras tanto, los fiscales esperan al surgimiento de más casos o información nueva al respecto.
Según medios, el acusado acumula más de 120 denuncias en su contra, realizadas por hombres y mujeres que tuvieron relación con él desde la década de los noventas.
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